¿Por qué realizar un tratamiento de odontología estética?
- Aumenta la autoestima
- Brinda resultados a largo plazo
- Mejora la apariencia de la sonrisa
- Mejora la funcionalidad de la cavidad oral
- Realza la belleza del rostro y lo rejuvenece
Blanqueamiento
Este procedimiento mínimamente invasivo tiene por objetivo reducir el tono del color de los dientes para que luzcan más claros.
Mediante el uso de agentes químicos blanqueadores (a base de peróxido de hidrógeno o de carbamida) que penetran el esmalte y alcanzan la parte interna del diente, se logra eliminar las manchas, las decoloraciones y las pigmentaciones causadas por ciertos alimentos, el tabaco y el proceso natural de envejecimiento.
Existen tres tipos de blanqueamientos: de clínica, de domicilio y combinado. Según las condiciones de cada caso, el profesional determina cuál es la técnica más adecuada para cada paciente. Siempre se debe realizar bajo la supervisión de un dentista.
Carillas
Son finas láminas de composite o porcelana que se colocan sobre la superficie frontal de los dientes con el fin de mejorar su apariencia, modificando o perfeccionando características de color, forma, tamaño y color.
Este tratamiento estético está indicado para corregir las imperfecciones asociadas a las fracturas, los desgastes, la desalineación, los cambios de color o las variaciones notables de forma y tamaño.
Las carillas proporcionan una solución funcional, duradera y muy estética para obtener una sonrisa que, además de lucir bella, funcione adecuadamente. El material se elige a criterio del profesional, teniendo en cuentas las necesidades, expectativas y condiciones de cada paciente.
Prótesis
Las dentaduras postizas son dispositivos que se fabrican de forma artificial y a la medida para reemplazar los dientes que se han perdido, con el fin de recuperar tanto la estética como la función masticatoria.
Existen prótesis removibles y fijas, completas y parciales, según la forma de insertarse en la boca y de la cantidad de piezas que estén reemplazando. De igual forma, se pueden elaborar en diferentes materiales como el acrílico, la resina o el metal.
Este tipo de dentaduras devuelven el confort para hablar, sonreír y masticar; además de permitir una adecuada distribución de las fuerzas oclusales y un equilibrio de las estructuras de la cavidad oral.